Los seres humanos debemos liberarnos de las barreras que nos impiden amarnos y conocernos a nosotros mismos para poder ser capaces de dar y de recibir amor. Para que reflexionemos dejo un resumen del libro de Robert Fisher, que para mi simboliza todo esto.
EL CABALLERO DE LA ARMADURA OXIDADA.
ROBERT FISHER.
Capítulo Primero: Dilema del caballero
Hace ya mucho tiempo , había un caballero que pensaba que era
amoroso y generoso. Luchaba contra sus enemigos y rescataba damiselas en
apuros. El caballero era famoso por su armadura tan brillante que los
lugareños decían que el sol salia en la mañana y se posaba en su
armadura. Su esposa Julieta y su hijo Cristobal eran fieles y amorosos
con el, pero un día el caballero tan obsesionado con su lugar dejo de
quitarse la armadura y su familia no aguantaba mas tener que escucharlo
rechinar su armadura mientras andaba la casa y no verlo. Cristobal
entristeció y su madre enfureció hasta el punto de ponerlo a elegir
entre quitarse la armadura o si no julieta y cristobal se irían a vivir a
otro sitio de ahí el dilema del caballero que termino por elegir
quitarse la armadura, pero sin poder en el pueblo resolver el dilema se
fue.
Capítulo segundo: En los bosques de Merlín
El Caballero partió, pero no sabía exactamente donde ir, el bosque
era muy grande. Cabalgó día y noche y mientras buscaba a Merlín se dio
cuenta de que no sabía nada de lo necesario para poder sobrevivir en un
bosque. Aunque era un valeroso guerrero no sabía nada de la vida.
Después de buscar y buscar encontró a Merlín sentado en un árbol,
rodeado de animales. Él se sentía solo por lo que decidió volver con su
familia, pero no sabía si ellos querían que volviera por lo que le dio
una carta a la paloma Rebeca para que su hijo le contestara. La paloma
tardó en llegar, pero cuando lo hizo volvió con un papel en blanco,
quería decir que su hijo no le conocía lo suficiente como para
proporcionarle una respuesta coherente. Esto animó al caballero a
encontrar una respuesta para quitarse la armadura.
Capítulo tercero: El sendero de la verdad
Cuando el caballero despertó, Merlín le apremió a abandonarle. Esto
molestó al caballero, estaba empezando a disfrutar de estar en el bosque
con los animales, pero Merlín dijo que el debía emprender su viaje solo
hacia un sendero cercano, el caballero se detuvo a pensar y le dijo al
mago que la tenia meses perdidos en el bosque y que no había ningún
sendero. El mago le dijo que los que no tenían vista suficiente para ver
mas allá de sí mismo no podían verlo y que habría tres castillos: el
castillo del silencio, el castillo del conocimiento y el castillo de la
osadía y que para llegar a la cima del sendero debía atravesar esos
castillos, el caballero acepto pero cuando tomo su caballo el mago le
dijo que no podía ir con él o con su espada que tenía que ser solo él,
la ardilla y Rebecca.
El caballero dudoso empezó su viaje, pues de ahí depararía su futuro
y lo que pasase con su armadura. Así el caballero se fue con la ardilla
y la paloma sin saber lo que venía a continuación.
Capítulo cuarto: El castillo del Silencio
El Caballero, completamente solo, entró en el castillo. Estaba
oscuro y no se oía nada. Entonces un hombre se acercó al Caballero, este
se sorprendió ya que este hombre era el rey al que el caballero debía
lealtad. El rey le confesó que solía recorrer el camino de la verdad a
menudo para encontrarse a sí mismo. Claro que le parecía más sencillo
decirles a sus súbditos que partía a las cruzadas, porque había altas
probabilidades de que no le entendieran.
El rey aclaró al caballero que tenía que pasar las puertas del
castillo solo, porque solo él podía encontrase a sí mismo. El Caballero
se quedó solo y comenzó a pensar y recordar cosas de su vida al final
comprendió que tenía miedo de estar solo. Esto le hizo pasar a una
segunda habitación más pequeña y comprendió el dolor que sentía su mujer
y lloró por ella. Esto le abría la puerta a una tercera habitación
donde encontró a su yo interior, su yo verdadero. Luego de tanta
emoción, se quedó dormido.
Al despertar estaba ya fuera del castillo y a su lado estaban la
paloma Rebeca y la ardilla. Se dio cuenta que la parte arriba de su
armadura había desaparecido. Feliz, siguió con su camino hasta llegar al
Castillo del Conocimiento.
Capítulo quinto: El Castillo del Conocimiento
Al entrar en el castillo del Conocimiento, quedó sorprendido porque,
aunque era muy grande y tenía una puerta de oro macizo, no tenía luz. A
continuación leyó una frase que le hizo reflexionar: "El conocimiento
es la luz que iluminará vuestro camino" poco después vio otra: "¿Habéis
confundido la necesidad con el amor?", le resultó difícil pero al final
comprendió que él amaba a su familia por encima de todo que al igual que
su familia lo necesitaba, ambos se necesitaban. Llegó a la conclusión
de que huía de la realidad y al igual que su mujer bebía para olvidarse
de los problemas, él prefería echar las culpas a la pobre Julieta y
olvidarse del tema.
También aprendió que no era realmente feliz y que la ambición no es
mala. Es buena cuando proviene del corazón y no del pensamiento. Le
costó entender esto pero al final consiguió salir del castillo y
prosiguió su camino de la verdad.
Capítulo sexto: El Castillo de la Voluntad y la Osadía
El caballero recorrió el camino hasta llegar al Castillo de la
Voluntad y la Osadía. De repente, se abrió la puerta y apareció un
dragón que no era como los demás ya que era demasiado grande y de
escamas verdes. El Caballero sintió miedo y, por más que llamaba a
Merlín, este no aparecía.
El dragón echaba fuego azul por todas partes. El Caballero intentó
entrar pero tenía miedo, entonces la paloma le dijo que podía derrotarlo
porque se conocía a sí mismo. Este dragón sólo se derrotaba con la
verdad y la confianza en uno mismo. Decidió entrar pero salió corriendo
porque se quemó.
El Caballero no quería volver a entrar pero comprendió que el dragón
llamado Dragón del Miedo y la Duda se podía derrotar porque era todo
una ilusión y si él entraba firmemente no se quemaría. Así lo hizo. Se
fue acercando al dragón y cada vez se hacía más pequeño, hasta tener el
tamaño de una rana que arrojaba semillas de duda, pero el caballero
logró pasar sin volverse atrás.
Capítulo séptimo: La Cima de la Verdad
Tras pasar los tres castillos subió finalmente la montaña
desgarrándose los dedos por culpa de las afiladas rocas. Entonces antes
de llegar a la cima encontró una inscripción, que decía: “Aunque este
Universo poseo, nada poseo, pues no puedo conocer lo desconocido si me
aferro a lo conocido” no sabía lo que quería decir y consideraba que era
muy injusto ya que no podía pensar estando colgado de una roca.
Entonces comprendió que tenía que liberarse totalmente. Dudó durante
unos segundos, pero al final se convenció con ayuda de Sam (su yo
interior) y decidió arrojarse al vacío.
Mientras descendía recordaba cosas de su infancia y logra liberarse
de todo lo que arrastraba. Entonces comenzó a elevarse y cuando se dio
cuenta estaba en la cima de la montaña. Terminó por emocionarse y lloró,
eran lágrimas que provenían del corazón por lo que estaban tan
calientes que se derritió la última parte de la armadura. Ahora si era
totalmente libre, había comprendido que el universo y él eran uno solo y
ahora tenía un mayor resplandor. Entendió que la vida consistía en el
amor, y todo lo que la formaba lo era.