La batalla más importante de nuestras vidas, la que casi nunca afrontamos con honestidad, voluntad y coraje y que sin embargo es la batalla más importante de nuestra existencia y que no deberíamos descuidar hasta vencer es la batalla contra nosotros mismos, contra nuestros temores e inseguridades, contra las dudas y el miedo que nos limita y neutraliza nuestra capacidad de buscar o construir otros caminos, de entender que al equilibrar el enfoque de nuestras acciones, pensamientos y corazón tendremos una enorme posibilidad de disfrutar cuanto hacemos y por tanto, hacerlo mejor.
miércoles, 30 de septiembre de 2015
LA BATALLA DE NUESTRAS VIDAS.
La Vida muchas veces se nos presenta cuando menos
contradictoria; dentro de las tragedias podemos encontrar oportunidades,
en medio de los retos y el sufrimiento podemos fortalecer nuestro
espíritu y desarrollar nuestra personalidad, y cuando sentimos por
momentos que nuestra sociedad esta en decadencia, que los valores y el
respeto a los demás se pierden, que actuar de buen corazón no es
suficiente, que el Amor y la Amistad poco valen, es cuando mas necesitamos aferrarnos a la Fe de que la Bondad predomina en nuestros corazones,
que hay que derrotar al miedo que la oculta, que el Amor y la Amistad
son más fuertes, porque los buenos somos más, muchos más.
La batalla más importante de nuestras vidas, la que casi nunca afrontamos con honestidad, voluntad y coraje y que sin embargo es la batalla más importante de nuestra existencia y que no deberíamos descuidar hasta vencer es la batalla contra nosotros mismos, contra nuestros temores e inseguridades, contra las dudas y el miedo que nos limita y neutraliza nuestra capacidad de buscar o construir otros caminos, de entender que al equilibrar el enfoque de nuestras acciones, pensamientos y corazón tendremos una enorme posibilidad de disfrutar cuanto hacemos y por tanto, hacerlo mejor.
La batalla más importante de nuestras vidas, la que casi nunca afrontamos con honestidad, voluntad y coraje y que sin embargo es la batalla más importante de nuestra existencia y que no deberíamos descuidar hasta vencer es la batalla contra nosotros mismos, contra nuestros temores e inseguridades, contra las dudas y el miedo que nos limita y neutraliza nuestra capacidad de buscar o construir otros caminos, de entender que al equilibrar el enfoque de nuestras acciones, pensamientos y corazón tendremos una enorme posibilidad de disfrutar cuanto hacemos y por tanto, hacerlo mejor.